Duet for one
Un emocionante combate en el que Juan Pastor entrega el testigo a su hija María en escena…
Gran ocasión para descubrir el apasionante trabajo de la sala madrileña Guindalera.
Sinopsis: Stephanie Abraham es una reconocida violonchelista casada con un director y compositor de fama mundial. Aquejada de esclerosis múltiple se ve obligada, en la cumbre de su carrera, a interrumpir su actividad musical para siempre. Empujada por su marido acude a un prestigioso psiquiatra para tratar una depresión profunda. Durante las sesiones, convertidas a veces en un verdadero “combate” con el psiquiatra, Stephanie transita por su tratamiento con el humor más sarcástico, el lirismo más conmovedor y las explosiones más coléricas, debido a su carácter de “artista temperamental”.
Poco a poco se irá enfrentando contra sus verdaderos fantasmas y el terrible sentimiento de pérdida guiada por el Dr. Feldman, empeñado durante el tratamiento en descubrirle otro mundo lleno de diferentes propósitos vitales que sustituyan a su pérdida irreparable. Pero los tratamientos utilizados hasta ahora para encontrar propósitos válidos, ¿sirven hoy en día, cuando descubrimos que vivimos en un universo cada vez más complejo para nuestras limitadas percepciones?.
FICHA
Intérpretes: Juan Pastor y María Pastor.
Espacio escénico: Juan Pastor.
Ayudante de dirección: José Bustos.
Vestuario y ambientación: Teresa Valentín-Gamazo.
Iluminación: Sergio Balsera.
Asesor terapeuta: Ignacio Jaenicke.
Fotografía: Alicia González.
Diseño gráfico: laplaya.org.
Ayudante de producción: Julio Provencio.
Comunicación y Prensa: Manuel Benito y Raquel Berini.
Dirección: Juan Pastor.
DOSSIER
Sobre la obra DUET FOR ONE
«DUET FOR ONE, de Tom Kempinski, fue producida por primera vez en 1980 en el West End de Londres y una nueva revisión de la obra se estrenó en el Teatro Almeida, también de Londres, en 2009. La inspiración de la obra partía de la historia real de Jacqueline Du Pré, considerada como la mejor chelista de la historia, casada con el director de orquesta Daniel Baremboim y que murió muy joven aquejada de esclerosis múltiple en la cima de su carrera musical. Hoy en día todavía existe una gran controversia por recientes publicaciones y películas que ofrecen versiones contrapuestas de los protagonistas de la historia con sus múltiples brillos y sombras. Dejando claro que Stephanie, la protagonista de la obra, es un personaje imaginado que nunca existió, no por ello hemos evitado cualquier eco lejano que nos recuerde el personaje real de Du Pré, sobre todo en su relación con un instrumento tan especial como el chelo.»
«Partiendo de la última revisión de la obra modificada por el mismo Kempinski, hemos querido poner el acento en el desarrollo de la acción entre paciente y terapeuta, en el tratamiento de lo que, posiblemente, será la dolencia más común del ser humano en los próximos años: la depresión y sus consecuencias. Es probable que en este año 2013, más de la mitad de la audiencia haya experimentado algún tipo de tratamiento de problemas psicológicos e incluso de algún tipo de depresión. Posiblemente más del 25% de la población adulta actual, en algún momento de su vida ha consumido algún tipo de antidepresivos. ¿Cuáles son sus causas? El mundo moderno ha cambiado, ya no nos sirven las medicinas que nos vendían para los remedios del alma enferma, porque lo único que consiguen es agravar la enfermedad que padecemos. Los descubrimientos más sorprendentes, como el mundo de la cuántica y el dominio de la técnica, nos han colocado en un mundo enteramente nuevo, y más que nunca el ser humano necesita encontrar nuevos propósitos para seguir en este universo absurdo. Los propósitos o razones que nos habíamos dado durante siglos ya no nos sirven.»
«La protagonista de la obra, Stephanie, encontró un verdadero propósito en su música, pero ese propósito desaparece en un cierto momento para siempre, suponiendo una profunda pérdida para ella y quebrándose su valor para enfrentarse con la vida. Sin embargo, vivir quiere decir evolucionar y es posible que ella sea capaz de entrar en otra dimensión más allá de las coordenadas que nos hemos trazado los humanos hasta ahora. Posiblemente el final quede abierto ante el espectador activo, pero también puede que quede en el aire la siguiente pregunta: “¿qué pasaría si repentinamente nos encontráramos en un mundo carente de toda actividad artística?” ¿Si tal cosa ocurriera, que pasaría?»
«En nuestra puesta en escena hemos querido poner el foco en esa reflexión, un trabajo escénico en el que lo fundamental es la desnudez de los actores en el marco de una terapia en la que el espectador es sujeto activo en un emocionante combate, si así se puede mencionar, entre la paciente Stephanie y un doctor que cruza toda clase de límites que hasta ahora se consideraban inviolables.»
Criticas
– Duet for one, cuando el más puro teatro es música (Jorge Fernández Guerra, 30-9-2013)
“Este conflicto se transforma en un dúo de actores de alta tensión. Para el equipo del Teatro de la Guindalera, esta tensión añade electricidad a la pareja actoral que no es otra que la formada por Juan Pastor (actor, director y fundador de este ejemplar Teatro), y su hija, María Pastor, una de las más brillantes e intensas actrices españolas.
Este montaje, con el que se celebra el décimo aniversario del Teatro Guindalera, una de esas pequeñas salas que hacen grande a una ciudad, brinda así una experiencia teatral de obligada asistencia, junto con el recuerdo de una figura musical que aún sobrevuela el imaginario de esa gran Europa que, ¡ay!, ya sentimos como algo irreparablemente desaparecido.” (Leer el resto aquí.)
– No diga teatro culto y de calidad, diga ‘Teatro Guindalera’ (Emilio Martínez, 1-10-2013)
“De vez en cuando la vida nos besa en la boca”. La estrofa de inicio de una de las grandes canciones del maravilloso Serrat se adecúa a la perfección a un milagro laico en estos “malos tiempos para la lírica” -por seguir con canciones, ésta de Golpes Bajos- y para la cultura, atacada desde donde más se debía cuidar, pongamos que se habla/escribe del Gobierno y otros poderes fácticos. El de la apuesta por la calidad, sin olvidar las mejores vanguardias, que hace una década inició el igualmente maravilloso Juan Pastor -y su equipo- para dar a luz una sala privada, hoy faro pasional en el arte de Talía: el madrileño Teatro Guindalera. Que ahora estrena ‘Duet for One’, del polaco Tom Kempinski, que se basa en la agitadísima vida de Jacqueline du Pré. Feliz cumpleaños.” (Leer el resto aquí.)
– Duet for one (José Henríquez, 4-10-2013)
“La sala y compañía Guindalera celebran diez años de buen teatro con el estreno del drama Duet por One (Dúo para uno), del autor inglés Tom Kempinski, el miércoles 9. Su aniversario reúne en esta obra a padre e hija, Juan Pastor y María Pastor, las dos generaciones de un colectivo que sigue apostando por un arte de palabra y actor.”
– Dos generaciones nos ofrecen un futuro en Duet for one (Julio Castro, 10-10.2013)
“El teatro de Guindalera acaba ofreciendo la oportunidad de convertir el espacio más oscuro en un atisbo de cambio y transformación hacia lugares más positivos en la vida. En la mente de cada cual está la elección cuando se encienden las luces y se abren las puertas. En esta vida que se basa en la realidad de la famosa Jaqueline du Pre, una de las mejores violoncelistas de los tiempos recientes. Da igual entrar en el grado de aproximación a la vida real, esto es teatro, y la realidad es toda aquella que entre el autor y la compañía quieran ofrecernos compartir y en este caso la oportunidad es infinita.” (Leer el resto aquí.)
– Un lugar en el que vivir (Antonio Hernández, 11-10-2013)
“Duet for one supone una interesante propuesta para profesionales de y aficionados a la música, sobre todo si lo son de y a la música clásica. Aunque la historia que se cuenta es capaz de transcender esa anécdota, pues siempre es anecdótico lo que somos o dejamos de ser como individuos. Como Jacqueline du Pré o su sosias en esta obra, Stephanie Abraham. Como el doctor Feldman, su psiquiatra. Como María Pastor, la actriz que la interpreta y ¡de qué manera! Como Juan Pastor, que no solo encarna al psiquiatra sino que dirige la obra y ha traducido el texto convirtiéndolo en palabras que quedan en la memoria” (Leer el resto aquí.)
– ¿Y si desapareciera el arte? (Flor Gragera de León, El País, 17-10-2013)
“El abismo de la pérdida con mayúsculas y el poder (o la ausencia de él) de los tratamientos que intentar afrontarla es clave en Duet for one. El propósito de vivir, el montaje que el Teatro Guindalera de Madrid ha elegido para celebrar que lleva 10 años llevando producciones sobre los escenarios y creando una forma de hacer teatro que va más allá de las carcajadas, las luces y los grandes escenarios. Un estilo que apuesta por la reflexión, y por el encuentro en la intimidad en este espacio de setenta butacas que supone el sueño de una familia, la de Juan Pastor, su hija, la actriz María Pastor, y de Teresa Valentín-Gamazo, una mujer repleta de fuerza que habla de un trayecto que han recorrido “a la inversa” (Leer el resto aquí.)
– ¿Qué sería del teatro madrileño sin Guindalera? (Álvaro Vicente, Revista Godot, 16-10-2013)
“A María Pastor la hemos visto hacer verdaderas joyas de la interpretación teatral y este personaje que encarna en Duet for one viene a poner otro diamante en su colección de piedras preciosas. Diamante pulcramente tallado, de múltiples facetas, de destellos deslumbrantes, de hipnótica belleza. Pero esta Stephanie que encarna aquí, trasunto de la chelista Jacqueline Du Pre, significa mucho más que un simple personaje más en su rica y variada trayectoria” (Leer el resto aquí.)
– Cumbre de una actriz y un director (Javier Villán, El Mundo, 9-12-2013)
“La ironía y el sarcasmo valen para acrisolar un talento de actriz que en la corta distancia se crece y resulta temible con una intensidad insólita. Es, posiblemente, la interpretación más rotunda y más poliédrica que le he visto a María Pastor. (…) Enfrente, un director sin mácula, Juan Pastor que, como actor, se dota a sí mismo de una firme y nítida generosidad”.